"Erna Solberg expresó sus condolencias por la muerte de ciudadanos de Rusia a causa del accidente de un helicóptero Mi-8 cerca de las costas del archipiélago Spitsbergen y pidió trasladar el pésame a los familiares y allegados de los fallecidos", dice el comunicado.
La nota cita a la jefa del Gobierno noruego, quien manifestó que se trata de un "trágico suceso que ha afectado tanto a ciudadanos rusos como a nosotros".
También valoró muy positivamente la cooperación entre los equipos de emergencia rusos y noruegos que participaron en la operación de búsqueda y rescate.
El 26 de octubre el Servicio de Emergencias de Noruega informó que un helicóptero ruso desapareció a unos kilómetros de Barentsburg situada en el archipiélago de Spitsbergen.
Las personas que viajaban en el Mi-8 fueron identificadas, todos son oriundos de Rusia y tres de ellos son empleados del Instituto de Investigación del Ártico y la Antártida.
La noche del 28 de octubre, al archipiélago se desplazaron equipos de rescate rusos.
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En la mañana del 29 de octubre, el Servicio de Emergencias noruego informó del hallazgo de fragmentos de la aeronave a 209 metros de profundidad.