"Según nuestra fuente, los altos oficiales de Partido Comunista de la URSS estimaban que había una conspiración bien organizada por la ultraderecha en EEUU con el fin de realizar un golpe; parece que estaban convencidos de que el asesinato no fue obra de una persona, sino el fruto de una campaña cuidadosamente planeada", dice el documento firmado por el entonces director del FBI, J. Edgar Hoover.
Las instrucciones de Moscú decían que la KGB (Comité de Seguridad del Estado) poseía datos que supuestamente apuntan a que el presidente Johnson fue el responsable del magnicidio del presidente Kennedy.
"La KGB dejó claro que el Gobierno soviético necesitaba saber sobre las relaciones personales entre el presidente Johnson y la familia Kennedy, en especial entre Johnson y (los hermanos de Kennedy) Robert y Ted", reza el informe.
"Nuestra fuente dijo también que los funcionarios soviéticos temían que en ausencia de un líder, algún general irresponsable pudiese lanzar un misil hacia la Unión Soviética. Además, las autoridades soviéticas creían que solo locos podrían responsabilizar a la izquierda, es decir, al Partido Comunista de EEUU por el asesinato del presidente Kennedy", señalan los archivos.
El asesinato de Kennedy se produjo en el apogeo de la guerra fría.
Esta semana, el presidente de EEUU, Donald Trump, destapó unos 3.000 documentos sobre el asesinato de John F. Kennedy, mientras que otra porción de archivos permanecerá inédita hasta finales de abril de 2018.