La operación se desarrolla "en los morros de São Carlos, Zinco, Querosene y Mineira", según informó la Secretaría de Estado de Seguridad en un comunicado.
Varias calles del centro de Río fueron cortadas al tráfico y el espacio aéreo está controlado, con restricciones para aeronaves civiles en los sectores donde actúan los militares, aunque no hay interferencia con las operaciones en los aeropuertos de la ciudad.
Los agentes buscan armas, drogas y a los líderes del narcotráfico que invadieron la favela Rocinha el mes pasado propiciando una guerra entre bandas rivales que derivó en la intervención del Ejército.
El 26 de octubre unos narcotraficantes mataron con 17 balazos a un coronel de la Policía Militar, lo que aumentó la tensión por las represalias que pueda tomar la policía en los próximos días.
En lo que va de este año han muerto 112 efectivos de la Policía Militar.
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Río de Janeiro vive una ola creciente de violencia desde hace algo más de un año, debido en parte a la crisis financiera que atraviesa el Gobierno del Estado de Río, de quien depende la Policía Militar, principal responsable de la seguridad en las calles.