El periódico bielorruso Naviny.by informa de que en el distrito de Repkinski, en la región de Chernigov, el río está erosionando la orilla ucraniana.
"En el área de la aldea de Lubech, en el distrito de Repkinski, la orilla está redondeada y su flujo se está cortando gradualmente. El proceso de erosión ha durado cincuenta años, pero en los últimos tiempos se ha acelerado. En más de un año, la corriente se ha llevado unos quinientos metros cuadrados de tierra", escribe el periódico.
Los expertos advierten de que si en los próximos años la orilla ucraniana no se refuerza cerca de Lubech, el curso fluvial cambiará y 660 hectáreas de territorio ucraniano se convertirán en una isla y pasarán a Bielorrusia, donde formarán parte de la región de Gomel, escribe el periódico ruso Vzglyad.
En un artículo, el medio señala que Kiev podría solucionar el problema gastando 15 millones de grivnas —medio millón de dólares— para fortalecer la orilla afectada, pero por el momento no se han tomado medidas.
No obstante, no deja de ser irónico que Kiev sí ratificara el Tratado de Demarcación de 1997 pero que Minsk no lo hiciera. Las razones que dieron los bielorrusos para negarse a suscribir el documento fue la supuesta deuda que Ucrania mantenía con Bielorrusia. Según diversos cálculos, la suma oscilaba entre los 80 y los 150 millones de dólares.