"Está claro que el señor Puigdemont no quiere dialogar", dijo Méndez de Vigo en declaraciones a los medios de comunicación desde los pasillos del Congreso de los Diputados.
En opinión de Méndez de Vigo, este rechazo muestra que la oferta de diálogo del Gobierno catalán no es sincera porque "cuando uno no viene a los sitios es porque no quiere hablar".
El pasado 17 de octubre, el portavoz del Gobierno catalán, Jordi Turull, afirmó que Puigdemont tenía "voluntad" de acudir al Senado, aunque acusó a la cámara alta de dificultar su comparecencia al poner sobre la mesa fechas coincidentes con el Pleno del Parlamento catalán de este 26 de octubre.
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El artículo 155 de la Constitución permite al Ejecutivo central, previa autorización del Senado, la adopción de medidas contra comunidades autonómicas declaradas en desobediencia.
Además, Rajoy solicita la toma de control de los Mossos d"Esquadra –la policía autonómica catalana–, de los medios de comunicación públicos de Cataluña y un recorte parcial de las competencias del Parlamento de Cataluña.
Por el momento se desconoce cuál será la respuesta del independentismo a la activación del 155, aunque la carta enviada por Puigdemont a Rajoy el pasado jueves ponía sobre la mesa la posibilidad de votar la declaración de independencia suspendida el pasado 10 de octubre si Madrid persistía en "impedir el diálogo".
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Sin embargo, otras voces apuntan a la posibilidad de que en ese pleno se proceda a una convocatoria de elecciones para evitar la intervención en el marco del 155, una opción que sobrevuela el debate público pese a que ningún miembro del Gobierno catalán habló públicamente apuntando a esta vía.