En esta época, en las calles sobran caléndulas, una flor que se cree que guía el espíritu de los muertos con sus colores vivos y su aroma.
Los maquilladores pintan a los participantes para que se parezcan a La Catrina, el nombre dado a una elegante figura esquelética popular en la cultura mexicana. También es muy popular su equivalente masculino.
El Día de los Muertos se celebra el 1 y 2 de noviembre.