"Al igual que las Zonas Económicas Especiales en México, nosotros estamos dispuestos a dar condiciones especiales hasta por 30 años", afirmó el alto funcionario ruso en un mensaje al foro "Diálogo Comercio-Industrial: Rusia México", celebrado en la Ciudad de México.
Las oportunidades de inversión para las compañías mexicanas en Rusia están sobre todo en la industria automotriz, señaló Mánturov.
En las llamadas 'Zonas Económicas Especiales', el Gobierno de México espera que se generen productos por 5.300 millones de dólares en los próximos tres años, con condiciones favorables para detonar el desarrollo en regiones poco industrializadas del país latinoamericano.
Con esas inversiones en plantas automotrices, prosiguió Mánturov, "si las empresas mexicanas se establecen allá [en Rusia], promoveremos sus productos" en el mercado euroasiático.
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El funcionario ruso mencionó que las compañías automotrices, entre las que destacó Nissan, General Motors, Ford y Renault —que también operan en México—, tienen una parte de su producción en Rusia.
Entre las empresas mexicanas establecidas en Rusia está Nemak, una fábrica instalada en 2015 para la producción de componentes para motores.
Con una inversión de 60 millones de dólares, la compañía mexicana produce unas 600.000 autopartes al año, que suministra sobre todo a Volkswagen en Rusia.
Al referirse a los países que representan un buen lugar para la competencia y los negocios, Mánturov lamentó que en las inversiones internacionales se apliquen "dobles estándares y no que existan reglas claras".
Mencionó, por ejemplo, que "en EEUU nos impusieron sanciones por la exportación de acero, por eso decidimos voltear hacia otros mercados como China".
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Por su parte, los inversionistas rusos expresaron su interés en realizar inversiones automotrices en México, para ofrecer autopartes hacia otros mercados.
Durante la visita de Mánturov, la compañía aérea mexicana Interjet expresó su interés en comprar nuevos aviones comerciales rusos MC-21, y la corporación Rostec presentó planes para lanzar la distribución de los helicópteros Ansat en México.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, destacó el 5 de septiembre pasado en una reunión con su homólogo ruso, Vladímir Putin, los "beneficios de la reforma energética" que permitió la apertura a empresas rusas en la industria petrolera mexicana, durante la cumbre BRICS de Xiamen, China.
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Putin mencionó a su contraparte mexicana el avance del intercambio comercial entre México y Rusia, que ronda los 2.000 millones de dólares, al crecer un 7,55% el pasado año 2016 y un 38% en los primeros seis meses de 2017.