En todo caso, la empresa rusa TVEL —líder mundial del sector del combustible para centrales atómicas— sigue siendo el suministrador principal del combustible para las plantas nucleares ucranianas.
El Ministerio de Energía de Ucrania ha comentado a Apostrof que para ampliar el uso del combustible estadounidense en las centrales nucleares ucranianas se necesita modernizar el sistema de control de la zona activa, adquirir e instalar unos equipos especiales y elaborar la documentación que reglamente el uso seguro del combustible nuclear.
"Tomándolo en consideración, Ucrania no piensa renunciar por ahora al combustible nuclear ruso a favor del combustible estadounidense", señaló el Ministerio de Energía ucraniano.
Los expertos ya han advertido que la decisión de Kiev de utilizar el combustible de Westinghouse amenaza la seguridad de las plantas atómicas ucranianas construidas según proyectos soviéticos.
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El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha declarado por su parte que existen dudas de que las centrales nucleares ucranianas puedan funcionar con el combustible estadounidense sin correr ningún peligro.