De esta manera, el país ibérico se posiciona en la tercera plaza de las naciones europeas en donde más ha crecido el riesgo de pobreza respecto a 2008, cuando este mal amenazaba a solo el 23,8% de los españoles. El país que más ha reducido sus niveles de riesgo de pobreza, según el informe Eurostat, es Polonia, donde esta cifra ha pasado del 30,5% al 21,9%.
Este índice se mide en cada una de las 28 naciones que conforman la UE y tiene en cuenta la cantidad de personas que dispone de menos del 60% del salario medio del país. Entre los segmentos de población de mayor riesgo los sociólogos ubicaron a las personas que tienen dificultades para pagar sus cuentas pendientes como el alquiler, la hipoteca o facturas y gastos no planeados. También tuvieron en cuenta la regularidad —como mínimo una vez cada dos días— con la que estas personas consumían productos como carne, pescado u otros alimentos ricos en proteínas.