Por otro lado, según el analista, es una señal para los chinos, que también están alarmados por la actividad militar de EEUU en el área de la península de Corea.
"Enviar a la región un portaaviones nuclear estadounidense y aviones de combate es una amenaza directa. Por lo tanto, seguro que escucharemos declaraciones negativas de Pekín. Y Corea del Norte realizará nuevos lanzamientos de sus misiles balísticos", opinó.
Lea también: EEUU lanza su 'desafío Tomahawk' rumbo a Pyongyang
El experto no descartó que Corea del Norte pudiera también realizar otra prueba nuclear para demostrar su fuerza.
"Es decir, EEUU blande las armas en las costas de la RPDC, y Corea del Norte responde lanzando misiles y probando armas nucleares. De momento, por desgracia, EEUU no está listo para abandonar su retórica y práctica de escalada", concluyó Borís Rozhin.
Las maniobras implican unos 40 buques, incluido el portaaviones de propulsión nuclear Ronald Reagan y dos destructores de la clase Arleigh Burke USS Stethem (DDG-63) y USS Mustin (DDG-89).
Además, en los puertos surcoreanos se encuentran submarinos nucleares USS Tucson y USS Michigan.
Lea más: La 'misión secreta' de los submarinos estadounidenses en las aguas de Corea
Durante los simulacros en el mar de Japón, según el medio, se practicarán ataques contra instalaciones militares en Corea del Norte en caso de "una situación de emergencia" en la península.
Corea del Norte realizó este año su sexta prueba nuclear, la de una bomba de hidrógeno para ser colocada en misiles intercontinentales, y una quincena de pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo el lanzamiento de dos supuestos ICBM capaces de alcanzar el territorio de EEUU y dos misiles de alcance intermedio que sobrevolaron la isla japonesa de Hokkaido.