"Es muy preocupante la pérdida de la confianza recíproca, difícil de restablecer. Lamentablemente, esas tendencias negativas no hacen más que acentuarse ahora que EEUU ha decidido de hecho retirarse del Plan de Acción Integral Conjunto y amenazado con una solución militar en la península de Corea", dijo Lavrov.
El presidente de EEUU, Donald Trump, anunció que su Gobierno se niega a certificar que Teherán está cumpliendo con el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), adoptado en 2015 para asegurar que el desarrollo nuclear de Irán no incluya la producción de armas.
Trump se declaró dispuesto a buscar que el Congreso estadounidense corrija los "defectos" del acuerdo nuclear con Irán, y advirtió que si eso no se logra el pacto será "cancelado".
El acuerdo prohíbe a Teherán acumular más de 300 kilogramos de uranio enriquecido al 3,67% durante 15 años y le obliga a enviar el excedente de ese material a terceros países, en particular a Rusia.
En enero de 2016, después de que el Organismo Internacional de Energía Atómica confirmara que Irán cumple las exigencias recogidas en el acuerdo, EEUU canceló algunas sanciones impuestas al país islámico, pero mantuvo en vigor otras restricciones, desvinculadas del programa nuclear.
A mediados de julio de 2017, el Gobierno de EEUU extendió sanciones financieras a un total de 18 personas y entidades supuestamente vinculadas con los programas nuclear y de misiles de Teherán.