El actual Protón fue diseñado como un cohete portador pesado capaz de colocar en la órbita hasta 7 toneladas de carga útil. Las tendencias actuales en la construcción de los satélites provocaron que esta capacidad sobre, y un cohete de menor potencia, pero más optimizado, resulta más atractivo para los operadores de satélites.
"Necesitamos un cohete que cueste entre 55 y 65 millones de dólares (…) Necesitamos una familia de cohetes que abarque diferentes variantes", afirmó Kirk Pysher, el presidente de ILS —una empresa conjunta con una mayor participación rusa— citado por el portal Spacenews.
"[El Protón Medium] cabe en este 'punto ideal' para lanzar satélites de clase mediana, y aquí competirá directamente con el Falcon 9 [de SpaceX]", apuntó Pysher.
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El primer lanzamiento de la nueva versión del emblemático cohete está previsto para el 2018 mientras la primera misión comercial está planeada para el 2019.
Los cohetes rusos Protón sufrieron un golpe a su reputación tras la suspensión de los vuelos y la revisión de los motores ya fabricados realizada recientemente por la agencia espacial rusa Roscosmos.
No obstante, con una serie de lanzamientos exitosos consecutivos, Pysher espera que el interés de los clientes hacia el cohete y, más importante, hacia su sucesor, vuelva.
Vídeo: Rusia reanuda los lanzamientos de cohetes espaciales Protón