"No hubo conversaciones con Ciccone, fue solo un saludo a una persona que yo ni sabía quién era", dijo Boudou durante la segunda jornada del juicio oral en la ciudad de Buenos Aires.
Ciccone, de 85 años, fue el único que aceptó declarar durante la audiencia del martes, aunque sólo respondió a las preguntas de su abogado.
El exempresario aseguró que se encontró en dos ocasiones con Boudou en septiembre de 2010 para negociar el levantamiento de la quiebra de la empresa antes de que el exfuncionario adquiriera el 70% de las acciones de la compañía a través de la sociedad The Old Fund, presidida por su abogado Alejandro Vandenbroele, sospechoso de ser su testaferro.
"No creo que nadie aquí tenga la capacidad para articular una historia tan larga", subrayó Boudou durante su breve exposición.
El exvicepresidente ha sido acusado en esta causa de los delitos de cohecho y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública por supuestamente intervenir ante la justicia para que se suspendiera la quiebra declarada de la compañía y así poder realizar un contrato con la administración pública nacional.
La próxima audiencia del juicio, a cargo del Tribunal Oral Federal número 4, tendrá lugar el 31 de octubre.
La causa
En el juicio también deben rendir cuentas el exjefe de gabinete del Ministerio de Economía, Guido Forcieri, el exjefe de asesores de la Administración Federal de Ingresos Públicos, Rafael Resnick Brenner, y el exsocio de Boudou, José María Núñez Carmona.
Este sobreseimiento fue de gran importancia, pues si lo hubieran condenado en aquella causa, aunque se tratara de una sentencia excarcelable, Boudou no hubiera podido evitar la prisión con una segunda condena.
Pero el 28 de septiembre se confirmó un tercer juicio en su contra por las supuestas irregularidades en las que incurrió como ministro de Economía al comprar 19 automóviles de alta gama en 2009 a través de su cartera.