"Una vez que pasen las elecciones vamos a hacer una presentación ante ONU (Organización de las Naciones Unidas) por este llamado a indagatoria", señaló la exmandataria durante una rueda de prensa.

Su comparecencia se produjo a un día de que el juez federal Claudio Bonadío le prohibiera su salida del país y la citara para que preste declaración indagatoria, el 26 de este mes, por supuesto encubrimiento del atentado contra la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina), de 1994.
"Hacemos responsable al juez Bonadío, el más desprestigiado de la República Argentina, de actuar como una correa de transmisión de sus obsesiones contra la oposición y mi persona en particular", manifestó.

El juez Bonadío ha acusado a la exmandataria de traición a la patria y encubrimiento por firmar en 2013, durante su gestión, un Memorándum de Entendimiento con Irán para aclarar las circunstancias del ataque a la AMIA, aunque el documento no entró en vigor pues no fue ratificado por el Parlamento del país persa.
Responsable de investigar desde 2000 las irregularidades que se cometieron en la investigación del atentado a la AMIA, Bonadío fue apartado de la causa cinco años después por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional por falta de imparcialidad y por ser "juez y parte", al ser también considerado sospechoso en el caso.
Responsabilidad de Macri
Por su citación judicial, la expresidenta también hizo "responsable" al presidente Mauricio Macri, al que acusó de recurrir a una "persecución política" y de hacer "un uso partidario y obsceno" del poder judicial, que "actúa casi como una fuerza de tareas del Poder Ejecutivo".
Entre tanto, en Argentina predomina un "marco económico y social complejo con una inflación que no se puede controlar y un endeudamiento vertiginoso, una desocupación creciente, pérdida de poder adquisitivo, de los salarios, y tarifazos", enumeró la expresidenta.
Ese "deterioro de la calidad democrática" viene acompañado de un "deterioro en las garantías electorales, en las libertades públicas, en las garantías jurídicas, y en la intimidad y en los datos personales", afirmó Fernández de Kirchner.
"Esto van sentando precedentes en la sociedad y va generando temores", concluyó la exmandataria desde el Instituto Patria, en la capital argentina.
Tras dos años sin ostentar un cargo público, Fernández volverá probablemente a la primera línea política a partir del 10 de diciembre, cuando asuman sus nuevos escaños los diputados y senadores electos en las elecciones legislativas.