La citación se produjo poco después de que Ankara, en una respuesta simétrica a Washington, suspendiera la expedición de visados de no inmigrante a ciudadanos estadounidenses.
La crisis diplomática entre los dos países se desató tras el arresto de Metin Topuz, un empleado turco del Consulado estadounidense en Estambul a quien se imputan los delitos de espionaje y atentado contra el orden constitucional.
Topuz fue detenido el 4 de octubre por un supuesto vínculo con la "organización terrorista de Fethullah Gulen" (FETO), que es como el gobierno turco cataloga a los seguidores de este teólogo residente en EEUU.
Tras la asonada, Ankara lanzó una campaña de purgas entre los simpatizantes de Gulen, autoexiliado desde 1999 en EEUU.
Decenas de miles de militares, policías, jueces, funcionarios y profesores fueron suspendidos, detenidos o están siendo investigados por presuntos vínculos con el movimiento gulenista.