"Cerca de un tercio de los empleados (27%) al menos una vez en su carrera se vengaron a sus empleadores, es decir robaron materiales de trabajo, borraron documentos importantes o filtraron informaciones confidenciales", dice el estudio.
Se indica que el 20% de los participantes del sondeo confesó haber copiado documentos como bases de clientes, informes o planes para usarlos en el nuevo trabajo o venderlos, y el 2% de los encuestados publicó las informaciones confidenciales en internet.
Cerca del 5% borró documentos, correspondencias o programas informáticos de sus empleadores al enterarse de su despedido.
Mientras que el 66% de los participantes del sondeo "no hicieron nada semejante al abandonar su antiguo puesto de trabajo".
La misma investigación mostró que el 73% conectan lapices USB y otros dispositivos de almacenamiento de datos a los ordenadores de trabajo, lo que a su vez puede provocar problemas de seguridad informática.
El 28% de los participantes de la encuesta confesó que a lo largo de una jornada laboral usan las redes sociales con fines personales.
En el sondeo, llevado a cabo en septiembre de 2017, participaron unos 750 usuarios de los productos de ESET.