De acuerdo con la institución, los cuernos reducidos a cenizas valían al menos 1,6 millones de euros —unos dos millones de dólares—.
El zoo de Dvur Kralove cuida a 17 rinocerontes negros y a cuatro rinocerontes blancos sureños, el mayor grupo de estos animales mantenidos en cautiverio en Europa.
A finales de marzo, el zoológico le cortó los cuernos a sus rinocerontes como medida drástica para proteger a los animales. La decisión fue tomada después de que un grupo de cazadores furtivos invadiera un zoo francés y matara a un rinoceronte blanco para robarle su cuerno. Aquello ocurrió a principios del presente año.
Pese a que el comercio de cuernos de rinoceronte está prohibido desde 1977 por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés), la demanda sigue siendo alta y un cuerno puede llegar a costar cientos de miles de dólares en el mercado negro.