Según el medio, la aeronave es capaz de eliminar al enemigo que se encuentre detrás sin dar vuelta gracias al radar trasero y el modo de marcha atrás, que permite lanzar el misil en la dirección opuesta a la del vuelo.
El novedoso radar de barrido electrónico activo en fase garantiza al Su-57 un amplio rango de detección de blancos no solo en el cielo, sino también en tierra y superficie del mar.
El medio señala también que al final del año terminarán las pruebas del sistema de comunicación S-111 para los cazas de quinta generación. El nuevo equipo proporcionará radiocomunicaciones telefónicas, así como comunicación cerrada entre aeronaves y puntos de control en tierra.
Además, los diseñadores se encargaron de garantizar la seguridad de los pilotos. La silla-catapulta de los cazas de quinta generación será capaz de salvar al aviador a cualquier altura, incluso en tierra. En el futuro, podrá tomar la decisión de salvar al piloto sin su participación.