"Fueron aprobados la declaración conjunta y todos los cuatro documentos", dijo el interlocutor de la agencia.
En Siria funcionan actualmente tres de las cuatro zonas de seguridad que Rusia, Turquía e Irán acordaron crear en mayo para poner fin a los enfrentamientos entre las fuerzas de Damasco y las de la oposición.
Dos semanas después se puso en marcha la segunda zona de distensión en Guta Oriental gracias a un pacto entre representantes del Ministerio ruso de Defensa y de la oposición moderada siria.
A principios de agosto entró en vigor la tercera área, al norte de la ciudad de Homs.
Durante el último encuentro en Astaná se acordó que en la zona de seguridad de Idlib en calidad de observadores de los territorios que controla Damascó habrá representantes de Moscú y Teherán, mientras la oposición siria contará con observadores provenientes de Ankara.
La fuente señaló que los documentos sobre el intercambio de prisioneros de guerra y el desminado de los territorios aún quedan por debatir, posiblemente en el próximo encuentro de Astaná.