"Consideramos que las empresas rusas entienden mejor que las compañías de muchos otros países cómo contribuir e invertir en nuestra economía, por eso estamos abiertos a la cooperación, no hay ningún obstáculo", dijo.
"El Kurdistán y Rusia tienen largas relaciones", recordó.
En los márgenes del XXI Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF) que acogió Rusia en junio pasado la petrolera rusa Rosneft y las autoridades del Kurdistán iraquí firmaron una serie de acuerdos para ampliar la cooperación estratégica en los ámbitos de exploración, extracción, logística y comercialización de hidrocarburos.
Ubicado en el norte del país y con una población estimada en torno a cinco millones de habitantes, el Kurdistán es la única región autónoma de Irak.
Su estatus está consagrado en la Constitución que fue aprobada en 2005, dos años después de derrocado el régimen de Sadam Husein.
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Las autoridades del Kurdistán iraquí se están preparando para celebrar un referéndum de independencia no vinculante el 25 de septiembre, paso que ha sido criticado tanto por Bagdad como a nivel internacional, en particular por Estados Unidos, Turquía e Irán.