"No creo que Bagdadi esté muerto, seguimos buscándolo cada día, solo estaremos satisfechos cuando se revele que está muerto", dijo el oficial en una rueda de prensa realizada en el Pentágono.
Según Townsend, los servicios secretos cuentan con pruebas de que el cabecilla terrorista permanece vivo y se oculta, posiblemente, "no en Irak ni en Al Raqa", sino en algún lugar del valle del Éufrates.
EEUU anunció en 2011 una recompensa de 10 millones de dólares por información que condujera al paradero de Bagdadi, y en diciembre de 2016 elevó el monto a 25 millones de dólares.
En los últimos años se multiplicaron los reportes de que Bagdadi estaba muerto o herido.