"A pesar del descenso de las llegadas, la probabilidad de que las personas que intentan llegar a Europa mueran sigue siendo alarmantemente alta", dice el estudio.
El Acnur estima que este año 2.253 personas fallecieron o desaparecieron en el mar, y al menos 40 murieron en las rutas terrestres dentro o cerca de las fronteras europeas.
En particular, el informe apunta que "numerosos migrantes y refugiados que llegaron a Italia de Libia tuvieron que superar travesías peligrosas por el desierto y sufrieron abusos, incluida la violencia sexual, torturas y secuestros por rescates".
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, declaró, citado en el informe, que "es moralmente inaceptable tomar medidas para reducir el número de los migrantes y refugiados que llegan a Europa sin esforzarse al mismo tiempo para restablecer la paz, el desarrollo y vías legales complementarias".
"No podemos hacer caso omiso a los abusos que obviamente tiene lugar solo porque suceden fuera de nuestra vista", subrayó.
A la vez señala que el número de los refugiados que vienen desde África del Norte a Italia "se mantuvo aproximadamente en el mismo nivel que en el año pasado", pues a finales de junio pasado se detectaron unas 83.750 personas.
"El informe del Acnur también muestra un incremento del número de las llegadas a España, con unas 9.500 personas que entraron en este país a partir de inicios de enero, principalmente por vía marítima, frente a las 4.936 que llegaron durante los primeros seis meses de 2016".
Europa es escenario de la crisis migratoria más grave desde la Segunda Guerra Mundial, causada por conflictos armados y problemas económicos en Oriente Medio y África del Norte.
Lea más: Libia pide a la UE redoblar la ayuda en la lucha contra el tráfico ilícito de migrantes
Según los datos del Acnur para este 24 de agosto, 2.421 personas murieron o desaparecieron este año en un intento de llegar a Europa por el mar.