"Todos los contratos respecto a (…) Turk Stream están concertados, la construcción del gasoducto está muy avanzada, (…) el proyecto se va a realizar independientemente de toda ley o acto jurídico y reglamentario", dijo en una entrevista con la cadena Rossiya 24 al comentar la influencia al proyecto Turk Stream de la nueva ley estadounidense que amplía las sanciones contra Rusia.
Nóvak señaló que Rusia examina la posibilidad de suministrar gas a través del Turk Stream a Bulgaria, Grecia e Italia.
"Tenemos mucho gas, podemos enviarlo allí y allá en caso de necesidad", dijo.
Subrayó que para hacerlo se deben obtener garantías correspondientes de la Comisión Europea.
La normativa también endurece las condiciones de financiación en EEUU para las entidades rusas sujetas a las restricciones y deja la puerta abierta a las sanciones contra las compañías europeas por colaborar con Moscú en importantes proyectos relacionados con la exportación de hidrocarburos.
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El proyecto Turk Stream contempla el tendido de dos ramales con una potencia total de 31.500 millones de metros cúbicos anuales de Rusia a Turquía, a través del fondo del mar Negro.
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Uno de los ramales se utilizaría para suministrar gas directamente al mercado turco y el otro para transportarlo a Europa a través de Turquía.
El primer ramal empezó a construirse en mayo pasado y debe entrar en funcionamiento en marzo de 2018, el segundo quedaría terminado en 2019.