La lista incluye al Centro Administrativo de los Testigos de Jehová en Rusia y a 395 organizaciones religiosas locales que forman parte de su estructura.
Entre otras acusaciones, a la organización se le imputa el rechazo de sus adeptos a las transfusiones de sangre. En general, de acuerdo con el ministerio, el trabajo de esta organización religiosa supone "una amenaza para la protección de los derechos e intereses de la sociedad y la seguridad pública."
Los miembros del grupo, por su parte, rechazaron las acusaciones del Ministerio de Justicia y señalaron que la negativa a las transfusiones de sangre no es extremismo, ya que no figura en la ley sobre extremismo.
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La sentencia del tribunal afecta en total a 2.277 grupos religiosos, que cuentan con 175.000 seguidores.
