"La intensificación de las negociaciones sobre la disputa por el nombre es una de las prioridades del Gobierno", dijo Osmani, citado por la cadena MRT, en una reunión con los embajadores de los países de los Balcanes occidentales.
"La presidencia de Bulgaria en el Consejo de la UE a partir de enero del año siguiente podría impulsar la integración (de Macedonia) en la UE y la OTAN", apuntó Osmani.
A mediados de julio, una fuente diplomática europea dijo que el problema del nombre de Macedonia y de su ingreso en la OTAN podría resolverse en tres o cuatro meses.
A mediados de junio, el ministro macedonio de Exteriores, Nikola Dimitrov, afirmó que el nuevo Gobierno espera el apoyo por parte de Grecia y las relaciones amistosas entre los dos países y que Skopie no se guía por la ideología del irredentismo, que tanto preocupa a Atenas y no pretende cambiar las fronteras.