"Las cosas siguen igual a hace un año cuando se hizo la primera marcha 'Ni Una Menos', que reunió a un millón de personas solo en Lima; las marchas lo que han logrado es visibilizar la situación de violencia hacia las mujeres", aseguró a esta agencia la integrante de Paro Internacional de Mujeres-Perú, uno de las 30 colectivos que colaboraron en la organización de la actividad del 12 de agosto.
La marcha de este año fue realizada por pedido de mujeres en general a las organizaciones a través de las redes sociales, y tuvo como eje central la situación de dos peruanas desaparecidas.
Una de ellas es Solsiret Rodríguez Aybar, madre de 23 años, estudiante de la Universidad Federico Villarreal y activista del movimiento "Ni Una Menos", y de quien no se tienen noticias desde el 22 de agosto de 2016.
"Al día siguiente, los amigos dijeron que la acompañaron a tomar el taxi y no la vieron más, pero después dijeron que no, que se había ahogado en la playa", indicó la activista.
Machado señaló que los amigos de la joven desaparecida están yendo a la universidad "como si nada hubiese pasado".
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Asimismo, subrayó la importancia de que se despenalice el aborto para casos de violación.
Entre enero y junio de este año hubo 59 feminicidios y 123 intentos de asesinato a mujeres en Perú, según las últimas estadísticas del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.
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La cifra es 11% mayor a los feminicidios ocurridos entre enero y junio de 2016, cuando se registraron 53.
En el caso de las tentativas de feminicidios este año, entre enero y junio, ha habido una más que en 2016 (122 casos).