"Queremos insistir en el derecho que tienen los Estados y los pueblos para elegir su sistema político, económico, como condición para garantizar la convivencia pacífica entre las naciones", dijo Espinosa en la VI Reunión Extraordinaria del Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América — Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), celebrada en Caracas.
Espinosa destacó además que debe primar el respeto a la soberanía y la autodeterminación de los pueblos y "la no injerencia en los asuntos internos de los Estados".
Para la ministra, al pueblo venezolano le asiste el derecho de dar una respuesta "libre y soberana para superar su situación interna, de conformidad con su Constitución, leyes e instituciones democráticas".
"Ninguna voluntad extraña puede conminar al Gobierno de Venezuela a tomar decisiones contrapuestas a sus intereses legítimos, ni a desconocer la voluntad general de su pueblo, que se ha expresado en las urnas a favor de instalar al poder constituyente", aclaró la jefa de la diplomacia ecuatoriana.
Se instaló en Venezuela una Asamblea Nacional Constituyente, rechazada por la oposición y con amplios poderes para reformular toda la estructura del Estado, en medio de una ola de protestas contra el Gobierno y de una severa crisis económica y social.
La ministra señaló como fundamental la necesidad de "defender y fortalecer" los "procesos progresistas, el poder popular, nuestras organizaciones políticas, y coordinar y establecer una fuerza colectiva en la región".
En su alocución, la representante ecuatoriana informó además que el próximo Encuentro Latinoamericano Progresista se realizará a fines de septiembre en Quito.
A la reunión del ALBA-TCP en Caracas asisten los cancilleres de Cuba, Bolivia y Nicaragua, además de Ecuador y del país anfitrión, Venezuela.
Estaba previsto que la jornada concluyera con una declaración final.