En su declaración al canal de noticias estadounidense MSNBC, el general Herbert McMaster subrayó que es del interés de Washington asegurar que Kiev pueda prevenir "futuras acciones desestabilizadoras provenientes de Rusia".
Un día antes, la cadena informó, citando a fuentes del Departamento de Defensa, de que el Pentágono había recomendado a la Casa Blanca aprobar el envío de sistemas de misiles antitanques FGM-148 Javelin a Ucrania. En estos momentos, las autoridades estadounidenses estarían valorando si suministrar estas armas a Kiev directamente o hacerlo a través de intermediarios.
Según la cadena, el contrato inicial tendría un valor de alrededor de 50 millones de dólares.
Un reciente artículo del periódico The Wall Street Journal, esta vez basado en fuentes de la Administración estadounidense, confirmó que el presidente Trump está valorando dar luz verde al suministro y agregó que a los Javelin podrían sumársele sistemas antiaéreos.
Los planes de abastecer al Ejército de Kiev con armas letales solo provocarán una nueva escalada del conflicto en el sureste ucraniano, opinan desde el Kremlin. Según el portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov, los países que "pretenden tener un papel en la solución del conflicto" debería abstenerse de tomar tales pasos y de desestabilizar el frágil equilibrio que se ha alcanzado con los acuerdos de Minsk.
'Guerra ilusoria': cómo se comunican las partes del conflicto en Donbás
Mientras tanto, desde las autoproclamadas Repúblicas de Donetsk y Lugansk han denunciado que los miembros de la OTAN ya han estado enviando armas letales a Ucrania que más tarde se han empleado en los campos de batalla. Como pruebas, han mostrado los restos de proyectiles de fragmentación para RPG-7 de producción búlgara, encontradas en los alrededores Avdéevka.
Solo negocios
Con la venta de estas armas a Ucrania, EEUU persigue metas egoístas y estaría intentando enriquecerse a costa del conflicto que vive ese país, comentan desde la Duma Estatal de Rusia.
"Los estadounidenses, así como su presidente, siempre han sido una nación absolutamente materialista. (…) Esto sería un simple intento de vender armas bajo la inventada excusa de combatir una agresión externa", explicó el vicepresidente del Comité de Defensa de la Duma, Alexandr Sherin, en declaraciones a RT.
De esta manera, el Gobierno de Kiev, que se encuentra sumido en una profunda crisis, gastaría en una innecesaria compra de armamento lo que debería destinar a la solución de sus problemas sociales. Sea como sea, en un hipotético conflicto con Rusia, estas armas no les serían de ninguna utilidad, resumió el parlamentario.