El diamante tiene 57 caras, cuenta con la calificación internacional Triple Excellent —la más alta—, pesa 51,38 kilates y tiene la certificación D VVS1, presente en solo el 1% de los diamantes, razones por las que se ha convertido en el más limpio y caro jamás creado en la Federación de Rusia, tal y como explica la empresa encargada de su creación, Alrosa, en una nota de prensa. La compañía produce el 97% de los diamantes rusos y el 27% a nivel mundial.
"En mi opinión, el precio no puede ser inferior a los 10 millones de dólares", dice el presidente de Alrosa, Serguéi Ivanov.
La colección completa pesa 179 kilates.