El gobierno mexicano sugerirá a sus contrapartes de EEUU y Canadá "revisar sus respectivos sistemas laborales y establecer medidas contra la corrupción, en busca de atacar situaciones que afecten el comercio y las inversiones de la región", dice el texto, publicado el 1 de agosto por el periódico El Financiero.
En ese pasaje plantea "evitar barreras injustificadas" a la apertura comercial, cuestionada por el presidente de EEUU, Donald Trump, y el "acceso preferencial a productos agropecuarios", que el año pasado significaron al país exportaciones a EEUU por 26.000 millones de dólares.
México sugerirá a sus contrapartes "la revisión de los sistemas laborales de las tres naciones, así como los sistemas de combate a la corrupción".
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El país latinoamericano se enfocará en "fortalecer el cumplimiento de las disposiciones nacionales y los compromisos internacionales en materia laboral", dice el texto presentado a los senadores, que lo discuten a puertas cerradas.
El objetivo es tener más acceso de trabajadores temporales mexicanos, una postura que "defiende el acceso preferencial" al mercado regulado estadounidense a personas de negocios y "mecanismos de movilidad laboral".
Asimismo, el segundo apartado, dedicado al "Comercio regional inclusivo y responsable", propone establecer medidas "contra los actos de corrupción que afecten el comercio y las inversiones".
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En ese capítulo se detalla la necesidad de que el nuevo tratado fije "un piso parejo para que todas las empresas de cualquier sector", incluidas las pequeñas y medianas empresas, puedan beneficiarse del acuerdo.
Finalmente, el cuarto capítulo del documento refiere a la certidumbre comercial y de inversiones, y en este sentido, llama a "defender el sistema imparcial de solución de controversias —estipulado en el Capítulo 19 del pacto comercial—, que el gobierno estadounidense pretende eliminar, y que causó irritación a los canadienses".
El TLCAN es un factor de certidumbre en la integración de América del Norte, "por esta razón, es indispensable mantener y promover disposiciones que contribuyan a hacer más previsibles las operaciones de comercio exterior y las inversiones", concluye el texto.
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México otorga un rol crucial a los mecanismos de solución de controversias que, a lo largo de más de dos décadas, han probado su efectividad, considerado "como un instrumento que permite hacer más predecible el comercio regional", aunque está abierto a modernizar este tipo de mecanismos.