Los moldavos estaban llamados a pronunciarse sobre la ampliación de las facultades del presidente, la celebración de elecciones parlamentarias anticipadas, la reducción del número de diputados de 101 a 71, la devolución de 1.000 millones de dólares que desaparecieron de tres grandes bancos en 2014 y la enseñanza de historia en las escuelas del país.
"Pese a la decisión antidemocrática y soberbia de la Corte Constitucional, quiero recalcar que no claudicaremos en nuestro propósito de conocer la opinión del pueblo sobre temas de interés nacional", escribió el líder moldavo en su página de Facebook.
"Los miembros de la Corte Constitucional, que son ciudadanos rumanos, entraron en pánico debido a las consecuencias sociales de este referéndum", puntualizó.
El presidente arremetió también contra la mayoría parlamentaria prooccidental y las facciones políticas que defienden la unificación con Rumanía, entre ellos el Partido Liberal.
"Temen el referéndum promoldavo por eso decidieron bloquear mis iniciativas", aseveró.
"No descartamos actos multitudinarios el 24 de septiembre en apoyo al referéndum", apostilló.
Dodon se encuentra enfrentado con el Parlamento y el Gobierno desde su elección como jefe de Estado en 2016 en los primeros comicios directos desde 1996.
En las últimas dos décadas era el Parlamento el que elegía al presidente del país.