Según anunció el miércoles 26 de julio el primer ministro Benjamín Netanyahu, Jerusalén se convertirá de esa manera en una ciudad que tendrá bajo su tutela asentamientos como Maale Adumim, Betar Ilit, Guivat Zeev, Efrat y varias de las colonias judías situadas al sur de Jerusalén, cerca de la ciudad palestina de Belén.
De esta manera la población judía de Jerusalén experimentará súbitamente un gran impulso que cambiará a la demografía de la zona, y Jerusalén se convertirá en un "símbolo", según Netanyahu.
Yoav Kish, diputado del Likud y uno de los proponentes del proyecto de ley, recalcó que los asentamientos mencionados se convertirán en "barrios autónomos" de Jerusalén sobre los que sin embargo no se aplicará la soberanía israelí y seguirán bajo la jurisdicción de las autoridades militares.