Cuando la brasileña Frankielen da Silva Zampoli Padilha llamó a su marido para quejarse de un fuerte dolor de cabeza, ya estaba en la novena semana de embarazo. Desgraciadamente, de camino al hospital, la mujer murió a causa de una hemorragia cerebral.
Lea más: Increíble: el embarazo cambia la estructura cerebral de las mujeres
Tras tres días de análisis y pruebas, los médicos anunciaron la muerte cerebral de Frankielen y que sus hijos no iban a sobrevivir.
"Me dijeron que tan pronto como los pequeños corazones de nuestros hijos dejen de latir, podré enterrar a mi mujer", comunicó Muriel Padilha, el padre de los gemelos.
"Realizamos una resonancia ultrasónica, pensando que los gemelos murieron junto a su madre, pero, para nuestra sorpresa, continuaron aferrándose a la vida. Entonces decidimos intentar salvarlos", relató Dalton Rivabem, director de la unidad de cuidados intensivos neurológicos del hospital.
At 9 weeks pregnant, Frankielen da Silva Zampoli Padilha tragically died of a stroke. Then, doctors noticed… https://t.co/VA0SLjZHsV
— Karen Gibbs (@KarenGibbsAust) 13 июля 2017 г.
El médico consultó con un colega de Portugal que se había encontrado con la misma situación y que había conseguido traer al mundo a un niño 107 días después de la muerte de su madre. También hubo otro caso en Polonia, cuando hubo un nacimiento 55 días después de la muerte de la progenitora.
Los médicos lograron mantener las funciones vitales de la mujer durante un tiempo récord de cuatro meses. El personal del hospital Nossa Senhora do Rocio, ubicado en la ciudad brasileña de Campo Largo, no se limitó a controlar la salud de la mujer, sino que, además, trataron de proporcionar a los pequeños cariño y amor maternal. Todos los días, los médicos hablaban con los niños, e incluso les cantaban canciones.
123 días después se obró el milagro y nacieron Ana Vitória y su hermano Asaf.