"La policía parece estar deteniendo a personas sin más motivo que fingir que está actuando para hacer frente a la delincuencia", denunció Amnistía Internacional (AI) al presentar su informe titulado "Falsas sospechas: Detenciones arbitrarias por la policía en México".
Un comunicado que recoge el sitio web de la ONG apunta que "la tóxica combinación de un sistema judicial defectuoso, unos agentes de policía sin la formación adecuada y una impunidad generalizada están fomentando las detenciones arbitrarias y dando lugar a tortura, ejecuciones y desapariciones forzadas".
A menudo, los agentes colocan pruebas falsas para incriminar a personas, especialmente en delitos relacionados con robos, armas y tráfico de drogas, mientras que el poder judicial no acostumbra a cuestionar la fuente de las evidencias que se les proporcionan.
"Esta investigación muestra que todo el mundo corre peligro de sufrir detención arbitraria en México, y que este peligro aumenta enormemente si eres pobre, si llevas la ropa indebida o si trabajas para defender los derechos humanos", cita la nota de prensa a Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.