"Pase lo que pase, el plebiscito contra la Constituyente va, y el llamado es a que salga la gente a la calle, que salgan masivamente y que sean parte de la historia, que ellos van decidir lo que (el presidente) Nicolás Maduro no quiere que decidan", dijo Guevara.
La consulta, de carácter informal, constará de tres preguntas a los electores:
- ¿Rechaza y desconoce la realización de una Constituyente propuesta por Nicolás Maduro sin la aprobación previa del pueblo venezolano?
- ¿Demanda a la Fuerza Armada Nacional y a todo funcionario público obedecer y defender la Constitución del año 1999 y respaldar las decisiones de la Asamblea Nacional?
- ¿Aprueba que se proceda a la renovación de los poderes públicos de acuerdo a lo establecido en la Constitución, y a la realización de elecciones libres y transparentes así como la conformación de un gobierno de unión nacional para restituir el orden constitucional?
El Consejo Nacional Electoral (CNE) advirtió que la convocatoria es ilegal y, de llevarse a cabo, constituiría usurpación de las funciones del Poder Electoral.
"La legitimidad de una elección no la da el árbitro, sino la cantidad de gente que salga y participe", dijo Guevara.
Además, está previsto que presencien la jornada cinco expresidentes y diputados de países de América Latina y Europa, cuyos nombres Guevara no quiso revelar pues no se conocerán hasta el domingo.
Sobre las críticas oficialistas de que el plebiscito constituye un golpe de Estado, Guevara sostuvo que "para ellos todo es un golpe de Estado; se haga lo que se haga será una amenaza de golpe de Estado".
Para ello estarán habilitados 1.933 "puntos soberanos" (centros de votación) distribuidos en locales cercanos a escuelas e iglesias entre las 07:00 y las 16:00 hora local (11:00 y 20:00 GMT).
Guevara sostuvo asimismo que podrán votar los ciudadanos que se encuentren en el exterior, pues "hay venezolanos organizados en más de 300 ciudades del mundo".
En cuanto a la seguridad, el vicepresidente del parlamento sostuvo que los vecinos se están organizando para resguardar los elementos de la votación.
"La seguridad la estamos organizando con los propios vecinos y la gente está preparando todos sus mecanismos de defensa", dijo.
Por tratarse de un evento sin intervención de las autoridades, no hay registro de los ciudadanos que votan por zona, por lo que se podrá participar en cualquier punto del país.
El diputado oficialista Pedro Carreño presentó el martes ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) un recurso para exigir la nulidad del plebiscito.
"Ese plebiscito solo tiene la intención de echar andar un plan golpista", dijo Carreño.
El vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, descartó que el plebiscito tuviera alguna validez.
"¿Qué plantea la derecha?, plantea una cosa que no aparece en la Constitución, la derecha plantea una cosa que se llama plebiscito para proteger la Constitución, es el mismo imperio que actúa", dijo Cabello en declaraciones al canal estatal Venezolana de Televisión.
Guevara replicó que "el TSJ puede decir lo que quiera con respecto al plebiscito", e incluso desafió al Poder Judicial a pronunciarse pues "eso motivará más a la población a participar el domingo".
"Si resuelven prohibir el proceso la gente saldrá, si amenazan con detener a quienes acudan, tendrán que meter presos a cinco millones de venezolanos", insistió.
Las manifestaciones comenzaron exigiendo la "restitución del orden democrático" y la celebración de las postergadas elecciones de alcaldes y gobernadores.
Pero desde el 1 de mayo, cuando Maduro convocó por decreto la Asamblea Nacional Constituyente, ésta se convirtió en el principal objetivo de la oposición, que ahora exige la salida del jefe de Estado como única vía para que cesen las protestas en las que han muerto 95 personas y más de 1.400 han sufrido heridas.
Negociar la salida
Acerca de una salida negociada, Guevara sostuvo que primero debe estar claro el objetivo.
"¿Una negociación para que Maduro se quede y los muertos queden sin justicia y aquí no pase nada?, pues no, ahora tiene que ser una negociación para una salida de esta crisis, para que haya un cambio de Gobierno y para que la gente pueda elegir un nuevo Gobierno", indicó.
El beneficio de casa por cárcel que se otorgó el 8 de julio al político opositor Leopoldo López, luego de tres años y cinco meses de prisión, puede verse como un paso hacia la negociación, pero depende de los acontecimientos de los próximos días, según Guevara.
"Si realmente fue una medida que el Gobierno asume para bajar la presión y demostrar que quieren rectificar, lo veremos en los próximos días, pero también puede ser simplemente una medida para que la calle pare, o bajo la creencia de que Leopoldo iba a claudicar, cosa que no ocurrió ni ocurrirá", aseguró.
La oposición sostiene que lo más importante ocurrirá después del domingo, cuando llegue "el levantamiento de toda Venezuela, la Hora Cero Nacional", dijo Guevara.
"Los detalles los daremos más adelante, pero en definitiva es la profundización al máximo de la protesta y el desarrollo del mandato que nos dará el pueblo a través del 16 de julio", dijo Guevara.
El vicepresidente de la Asamblea Nacional, declarada el año pasado en desacato por el TSJ, hizo un llamado a la "sensatez" de Maduro, a quien instó a negociar su salida.
El mandatario ha reiterado que no dejará su cargo por una vía distinta a la electoral, recordando que las elecciones presidenciales están previstas para 2018.