"Creo que las relaciones entre Xi Jinping y Vladimir Putin han llegado a la cima de confianza y amistad, incluso difícil de comparar con otros mandatarios. Creo que es un fenómeno excepcional", comentó Záitsev.
Al mismo tiempo instan a todos los Estados involucrados a comenzar negociaciones para "definir los principios comunes de las relaciones, que incluirían no recurrir a la fuerza, renunciar a la agresión, optar por la coexistencia pacífica y los esfuerzos en aras de desnuclearizar la península de Corea para lograr una solución exhaustiva de todos los problemas, incluido el nuclear".
Moscú y Pekín, preocupados por la crisis en la península de Corea, llamaron a la comunidad internacional "a apoyar esta iniciativa que allanará el camino real a la resolución de los problemas de la península de Corea".
"Esperar que nadie nos impida arreglar este problema sería prematuro, teniendo en cuenta que, además de Rusia y China, en la solución de la crisis en la península de Corea están involucradas otras potencias, como EEUU y Japón", señaló el experto.
"EEUU ya ha anunciado que supuestamente está listo para unas acciones duras y fuertes. Mientras tanto, Rusia y China aseguran que el problema debe ser resuelto por etapas solo a través de negociaciones", comentó Záitsev a Sputnik.
Con la prueba del 4 de julio se eleva a 10 el número total de los ensayos de misiles balísticos que Corea del Norte realizó en lo que va de año, a pesar de las prohibiciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
En julio de 2016, Corea del Sur y EEUU lograron un acuerdo para desplegar en territorio surcoreano una batería THAAD, que se hará operativa a finales de 2017 como muy tarde.
Las negociaciones sobre la desnuclearización de la península, que las dos Coreas, China, Japón, Estados Unidos y Rusia desarrollaron de 2003 a 2007, siguen paralizadas desde 2009 cuando Pyongyang, molesto por el recrudecimiento de las sanciones internacionales en respuesta a sus pruebas nucleares y de misiles, se negó a continuar el diálogo.