"La Policía Rodoviaria está dialogando con el Ministerio de Planificación, Presupuesto y Gestión para que haya una rápida recomposición del presupuesto y un consecuente restablecimiento de los servicios y normalización de la actuación de la institución", aseguró la nota oficial.
Por el momento los policías de carreteras dejarán de realizar rescates con helicópteros, se suspenderán las patrullas aéreas, las terrestres se reducirán y se cerrarán algunas unidades operacionales, mientras que otras reducirán sus horarios de atención al público.
Según el comunicado, las medidas se tomarán de modo que impacten lo menos posible en los ciudadanos, priorizando la atención en accidentes con víctimas y en acciones que sean de competencia exclusiva de los agentes de carreteras.
La Policía Rodoviaria no es la única que encuentra dificultades debido a la crisis económica que atraviesa Brasil; la semana pasada la Policía Federal anunció que suspendía la emisión de nuevos pasaportes por falta de presupuesto.