Las remesas familiares enviadas por los mexicanos desde el exterior a su país, sobre todo desde EEUU, sumaron un total de 11.532 millones de dólares entre enero y mayo de este año, indicó un reporte del organismo autónomo del Estado encargado de la política monetaria.
En el pasado mes de mayo, el último que contiene el informe, las remesas recibidas crecieron 4,4%, al alcanzar un total de 2.586 millones de dólares.
El banco central reportó que el año pasado los mexicanos emigrantes enviaron a sus familias un total 26.972 millones de dólares, lo que representó un aumento de 8% con respecto al 2015, y un máximo en los registro oficiales de Banxico en los últimos diez años.
Esa cifra anual superó ligeramente la inversión extranjera directa registrada en México en 2016, que se elevó a 26.600 millones de dólares, y fue la segunda fuente de divisas detrás de las exportaciones de autos, que el año pasado tuvieron un valor de alrededor de 34.000 millones de dólares.
Desde 2015, las remesas superaron a las exportaciones petroleras y a los ingresos por turismo, de forma que el año pasado esos envíos a las familias mexicanas fueron mayores a las exportaciones de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), que reportó ventas al extranjero por 18.524 millones de dólares en 2016.
El incremento de las remesas en los primeros meses de este año se debe, según expertos, a la prevención o temores de los mexicanos en EEUU ante posibles restricciones bancarias a los envíos que podría imponer el presidente estadounidense Donald Trump.
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Sin embargo, las amenazas del Gobierno de EEUU de imponer nuevas cargas fiscales a las transferencias de dinero para recaudar fondos destinados a la construcción de un muro en la frontera con México no se han concretado en el marco de negociaciones comerciales bilaterales que comenzarán en agosto próximo.
