Según informa el medio The Guardian, el automóvil autodireccionado de Volvo es incapaz de detectar a los canguros debido a que los saltos confunden sus sistemas, dice el fabricante de automóviles sueco.
El director de Volvo Australia, Kevin McCann, dijo que el descubrimiento era parte del desarrollo y pruebas de la tecnología sin conductor, y no debería plantear problemas para cuando los coches sin conductor de Volvo estén disponibles en 2020.
"Enviamos a nuestros ingenieros a Australia para comenzar el ejercicio de reunir datos sobre cómo se mueven y se comportan los animales para que las computadoras puedan entenderlo más", dijo McCann.
A principios de junio, el gerente técnico australiano de Volvo, David Pickett, comunicó a ABC que los problemas habían surgido porque los sistemas de detección de objetos de sus vehículos usaban el suelo como punto de referencia. Esto significa que los saltos de los canguros hacían difícil juzgar lo cerca que estaban.
"Cuando está en el aire realmente parece que está más lejos y cuando baja a tierra parece que está más cerca", explicó el gerente el núcleo del problema de autodetección.
McCann añade: "Los vehículos autónomos están en continuo desarrollo. Todavía no existe un auto sin conductor, pues, desarrollar la tecnología para reconocer a los canguros es parte del desarrollo [de estas tecnologías]".
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