"Los problemas de falta de liquidez y de insolvencia de algunos gobiernos subnacionales (departamentales y municipales) nos muestran que hay dificultades para cubrir los presupuestos, hay reclamos de gobiernos locales para cubrir ciertos compromisos", dijo Arce que es investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla).
Arce afirmó que los últimos datos muestran que el precio el petróleo de Texas, que utiliza Bolivia para fijar sus precios de exportación de gas, ha caído en las últimas semanas a 42 dólares por barril cuando la expectativa del Gobierno era que se mantenga por encima de los 50 dólares.
Asimismo explicó que sectores como la minería y la agroindustria también muestran problemas y la perspectiva a corto plazo es de incertidumbre.
"Hay algunos indicios sobre el comportamiento macroeconómico y también sectorial que muestran un debilitamiento del crecimiento de la economía boliviana", remarcó el investigador del Cedla.
Advirtió que la caída de la demanda internacional de productos ha generado ya en 2016 un déficit de la balanza comercial de al menos 500 millones de dólares con relación al 2015 "lo que repercutió negativamente en la balanza de pagos y la reducción de las Reservas Internacionales Netas".
Para el investigador del Cedla "hay otras tendencias claras de austeridad en el sector de hidrocarburos, como en Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos donde hay temor de los trabajadores de que esa austeridad se traduzca en reducción de personal".
A su vez, la Central Obrera Bolivia, dijo Arce, ha advertido que empresas del sector fabril están al borde del cierre y anunciaron despido de trabajadores.
"Esto se podrá lograr si el Gobierno asegura una fuerte inversión pública y privada internacional, pero no por el crecimiento de los sectores productivos que muestran problemas", reparó Arce.
Para el economista y docente de la Universidad Mayor de San Andrés, Erik Rojas, el panorama no es de los mejores.
"Por lo que vemos se han acabado los recursos y el Gobierno tiene que negociar con las propias instituciones del Estado, pesos a peso, para cubrir sus presupuestos, como el caso reciente del Tribunal Supremo Electoral" que tendrá que llevar adelante el proceso eleccionario de autoridades judiciales, en diciembre de este año, con rubros recortados, sostuvo el docente universitario.
Para Rojas esa fue "la mejor demostración de que, a esta altura del año, se ha agotado el dinero y hay mucha desesperación para conseguir los recursos necesarios que garanticen el funcionamiento regular del Estado".
Pese al balance de los expertos, el Gobierno del presidente Evo Morales aseguró que Bolivia mantendrá sus niveles de crecimiento y la estabilidad económica.