"El clamor de justicia que hoy se escucha en todas las esquinas del país no será ignorado en ninguna decisión de esta corte; no fallaremos a los que esperan de nosotros una actuación rigurosa para mantener su esperanza de justicia, no seremos avaros en nuestra acción de garantizar efectividad de justicia", dijo.
Antunes pronunció estas palabras en el discurso de cierre de los trabajos del Supremo del primer semestre, ya que ahora los magistrados disfrutarán de 30 días de vacaciones.
Durante este periodo la presidenta estará de guardia, así que será ella quien se encargue de los procesos relacionados con las acusaciones de corrupción vertidas por los directivos del grupo empresarial JBS.
La principal de ellas es la que afecta al presidente del Gobierno, Michel Temer, denunciado formalmente por corrupción.
La denuncia está ahora en la Cámara de Diputados, que deberá decidir si autoriza al Supremo a investigar el caso y juzgar a Temer.