"Hay una ola rusófoba en la asamblea contra toda persona que pretenda integrar a los países europeos en una organización paneuropea que vaya más allá de la propia UE", mantienen desde el equipo de Agramunt.
La PACE aprobó este 27 de junio enmiendas al reglamento en vigor que allanan el camino a la destitución de Agramunt, sometido a duras críticas por sus intentos de integrar a Rusia en la asamblea y su viaje a Siria para entrevistarse con Bashar Asad.
El equipo de Agramunt considera que los representantes de países como Francia, Alemania o Portugal están solidarizados con el presidente pero no se atreven decir lo que piensan porque están intimidados por "una minoría muy gritona".
"El señor Agramunt fue a visitar a Bashar Asad como mediador por la paz, no fue en ningún momento a jalearle ya que considera que es un dictador", señalan las fuentes consultadas.
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Sin embargo, "hay gente que eso no lo ha querido entender y que ataca a Agramunt porque saben que de esa manera se rompe el diálogo con Rusia".
"Hay gente que se piensa que la asamblea es una segunda Rada Suprema y le gusta crear escándalos para salir en los medios de sus países de origen", inciden estas fuentes.
El presidente de la PACE, según confirmó su equipo, emprenderá acciones legales contra el cambio de reglamento que abre paso a su sustitución e intentará "reestablecer la normalidad democrática" dentro de la asamblea.