Las nuevas sanciones de EEUU contra Irán y Rusia, las sanciones contra los Estados independientes, contradicen los compromisos de Washington en el marco del derecho internacional y la Carta de la ONU, declaró hace poco el presidente del Parlamento iraní, Alí Lariyaní.
El representante de Irán emplazó también a los países de Eurasia a crear un mecanismo para que "los Gobiernos de la región puedan contrarrestar las decisiones arbitrarias por parte de EEUU".
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"Lariyaní se refería a que, para resistir la expansión estadounidense y la presión de las sanciones, los países del continente euroasiático deben fortalecer su cooperación. También deben ser conscientes de que, en general, los estadounidenses pueden y van a imponer sanciones contra cualquier país que declare su independencia y que tenga una política exterior soberana". Así valoró el analista político Alexandr Sotnichenko las palabras del alto cargo político iraní.
Hasta ahora, la Federación de Rusia, Irán y otros países de la región simplemente carecen de algunos mecanismos que ayuden a eludir la presión de las sanciones de Washington, subrayó.
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La declaración de Lariyaní es, en su opinión, la piedra angular para construir un nuevo mundo euroasiático, lo que es ahora especialmente relevante, dado que solo unidos es posible resistirse a la hegemonía estadounidense.
"Cuanto antes seamos capaces de limar las contradicciones entre los países del continente, más rápido arreglaremos la mayoría de los conflictos. Cualquier asociación requiere encontrar ciertos compromisos que superen las controversias. Todos los Estados soberanos tienen sus propios intereses nacionales, que a menudo no coinciden con los de sus vecinos. Además, persiste el cabildeo, que de alguna manera afecta al establecimiento de relaciones de amistad entre los Estados y los sindicatos," subraya el analista político.
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