"Es espantoso que el representante de Venezuela quiera dar lecciones de democracia a Brasil; la representación de Venezuela perdió no solo el contacto con la realidad, sino también el sentido del ridículo", aseguró Bezerra en el marco de la 47 Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que se celebra en México hasta este miércoles.
Las palabras de la delegación brasileña se produjeron después de que el representante venezolano ante la OEA, Samuel Moncada, acusara a Brasil de no tener ninguna autoridad para hablar de democracia, puesto que el actual Gobierno de Michel Temer accedió al poder a través de un "golpe", añadió.
Moncada hacía referencia así al proceso de impeachment que destituyó a la expresidenta Dilma Rousseff (2011-2016) y colocó en el poder a Temer, lo que la izquierda brasileña considera ilegítimo.
Bezerra sostuvo que en Brasil "no hubo ningún golpe, el cambio de Gobierno se dio en un proceso constitucional conducido por instituciones independientes".
También contestó a las críticas por los escándalos de corrupción que rodean al Gobierno de Temer.
Aseguró que Brasil escogió la democracia para resolver los problemas "que son visibles y son enfrentados", al contrario de lo que ocurre en Venezuela, donde los problemas visibles se dan porque no hay democracia, opinó.
El representante del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil subrayó que en su país la sociedad es libre para manifestarse, la prensa puede informar y criticar y la Policía tiene libertad "para investigar a quien sea, puesto que en la democracia de verdad nadie está por encima de la ley".
"Brasil se enfrenta a problemas, desafíos, pero los afronta democráticamente, a través de instituciones fuertes e independientes; en Venezuela es al contrario, la falta de instituciones independientes tan sólo agrava los problemas de su país y el sufrimiento de su pueblo", sostuvo el representante brasileño.
El lunes se realizó una sesión preliminar de cancilleres en la OEA para continuar abordando la crisis política en Venezuela y fue suspendida por falta de los 23 votos necesarios para ser aprobada.
Venezuela enfrenta una crisis política que ha desencadenado en protestas desde el pasado 4 abril, las cuales han dejado 74 muertos y más de 1.300 heridos.
El Gobierno de Venezuela responsabiliza de las víctimas a la oposición y asegura que hay sectores radicales aliados con bandas criminales que buscan generar víctimas fatales para provocar una imagen de ingobernabilidad y promover una intervención.
Por su parte, la oposición venezolana asegura que existen grupos paramilitares aliados al Gobierno que reprimen las movilizaciones juntos a los cuerpos de seguridad para asustar a los manifestantes y evitar protestas.