"Le estamos quitando (derechos) al pobre, al que sufre, al que está preso en el tráfico, que toma el autobús, con lluvia, con sol; es a ése a quien le estamos quitando derechos, no al empresario", criticó la líder del Partido de los Trabajadores (principal partido de la oposición) Gleisi Hoffmann, según recoge el diario Folha de São Paulo.
La reforma laboral es uno de los pilares de la política económica del Gobierno Temer (Partido del Movimiento Democrático de Brasil), que la defiende como una forma de facilitar la contratación y generar empleo porque flexibilizará las relaciones entre trabajadores y empresarios.
La oposición y los sindicatos mayoritarios, en cambio, creen que la reforma eliminará derechos fundamentales de los trabajadores, argumento que sirvió para impulsar una huelga general el pasado día 28 de abril.