"Quienes ejercen de forma hegemónica la instrumentalización de la OEA para intervenir países… deben estar algo preocupados, porque por primera vez en la historia de esta organización… se retira un país; pero no solamente se retira un país, sino que sabemos de otros países que comienzan a considerar su retiro en razón de las desviaciones profundas que sigue exhibiendo esa organización", expresó.
Rodríguez ofreció estas declaraciones a la prensa desde la ciudad mexicana de Cancún, donde se realiza la 29 Reunión de Consulta de los ministros de Relaciones Exteriores de la OEA, que en esta oportunidad aborda la situación política de Venezuela.
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Minutos antes, la canciller venezolana anunció el retiro de su país de la reunión.
"Nos retiramos de la reunión de consulta por las razones que ya expusimos, de no reconocer la forma fraudulenta como se llegó a este momento y de no reconocer ningún resultado que de ella se derive", indicó.
En reiteradas ocasiones la ministra venezolana ha denunciado que las consultas y debates sobre Venezuela en la OEA han sido convocadas si la autorización al Gobierno de ese país.
En ese tiempo, el Gobierno venezolano ha dicho que no reconocerá las decisiones contra su país que tome el bloque, que sostiene, está manipulado por Estados Unidos.
La ministra venezolana también se refirió al papel de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y aseguró que en lugar de opacar a la OEA, debería ser "un espacio de concertación", mientras la OEA un escenario de encuentro con EEUU.
Sin embargo, consideró que "ni siquiera para ello sirve esta organización (OEA); es muy poco útil para lo que tiene que ver con el aspecto constructivo de los países".
El 31 de mayo se realizó la primera reunión de consulta sobre la crisis venezolana, pero los cancilleres resolvieron suspender esa instancia para consensuar un texto que reconciliara los borradores propuestos por los países que integran la Comunidad del Caribe (Caricom) por un lado y el firmado por Canadá, EEUU, México, Panamá y Perú, por otro.
El texto de la Caricom llama a respetar el Estado de derecho, los derechos humanos y la Constitución venezolana e insta a Caracas a reconsiderar su salida de la OEA, resuelta por el Gobierno de Nicolás Maduro a fines de abril, cuando el bloque decidió organizar esta reunión de consulta sobre Venezuela.
El texto de Canadá, EEUU, México, Panamá y Perú se hace eco de varios reclamos de la oposición venezolana.
El borrador propone un cronograma electoral claro, la liberación de presos por razones políticas, el respeto de la separación de poderes y la aceptación de asistencia humanitaria a la población para paliar la escasez de alimentos y medicinas.
En la reunión varios países manifestaron su rechazo a la elaboración de una declaración sobre la situación de Venezuela, de la que muchos estados no fueron informados.
Actualmente los cancilleres están debatiendo la posibilidad de llamar a receso para que aquellos países que no accedieron al texto puedan tener tiempo para analizarlo.
