De ese modo comentó la declaración del ministro de Exteriores de Alemania, Sigmar Gabriel, y el canciller federal de Austria, Christian Kern, donde criticaron las nuevas sanciones que EEUU pretende imponer al sector energético de Rusia.
"Muchos agricultores e industriales alemanes sufren pérdidas a causa de estas sanciones, por eso el disgusto es bastante comprensible y lógico", dijo.
Peskov subrayó que Moscú mantiene una actitud "sumamente negativa" respecto a las sanciones y cree que "como antes, son capaces de causar daño adicional no solo a nosotros, sino también a los que apoyan y se unen a estas sanciones".
Los firmantes de la declaración resaltaron que las sanciones políticas no deben mezclarse con los intereses económicos y expresaron su esperanza de que el Departamento de Estado de EEUU consiga modificar la normativa.
El Senado de EEUU aprobó el 14 de junio una enmienda a un proyecto de ley que expandiría las restricciones contra Rusia y permitiría al presidente Donald Trump imponer sanciones a personas y empresas que prestan algún tipo de ayuda para la construcción de tuberías rusas de exportación de hidrocarburos en proyectos cuyo valor de mercado sea equivalente o superior a un millón de dólares.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la situación en Ucrania y la adhesión de Crimea a Rusia tras un referéndum celebrado en marzo de 2014, en el que más del 96 de los votantes avaló esta opción.
Ese mismo año, EEUU, la Unión Europea y otros países aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú, que respondió con un veto a las importaciones agroalimentarias.