30 de abril 2017, 13:36 GMT
En particular, el mandatario ruso declaró que está muy orgulloso de sus hijas, las cuales ya tienen sus propias familias. Además, admitió que a veces discute con sus yernos, que muy a menudo miran las cosas de otra manera.
"Nosotros no debatimos, más bien discutimos. Y ellas [sus hijas] también. Pero ellas no se dedican a la política, ni a ningún tipo de negocio grande. Se dedican a la ciencia y a la enseñanza", dijo.
Hablando de sus nietos, Putin confesó que los quiere mucho, al tiempo que se lamentó ya que "por desgracia no tiene suficiente tiempo para jugar con ellos".
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