El PRI (Partido Revolucionario Institucional) del presidente Enrique Peña Nieto "saldrá perdiendo, independientemente del resultado, porque incluso en caso de ganar en el estado de México será por un margen muy pequeño, y reflejará que está perdiendo fuerza a nivel nacional", dijo a Sputnik el analista José Antonio Crespo, del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE).
El desempeño del candidato del PRI Alfredo del Mazo, primo hermano de Peña Nieto, en esa provincia donde el partido gobernante ha cargado toda su fuerza, será determinante para saber el futuro del viejo partido que regresó a la presidencia, tras perderla durante 12 años por primera vez, luego de siete décadas en el poder.
"Si el PRI pierde en el estado de México o gana con un margen pequeño, será un desplome muy fuerte que dejará al partido en su posición más débil desde que perdió la presidencia en el 2000", por primera vez en 71 años, dijo el autor del libro clásico sobre la crisis del presidencialismo mexicano, "Jaque al rey".
El PRI ha gobernado durante 88 años ese feudo que rodea a la Ciudad de México, que se convirtió en su retaguardia mientras el partido estuvo alejado de la presidencia.
Desde la llamada "gran fábrica nacional de votos", el estado de México es un enclave industrial, rodeado por cerros de cinturones de pobreza, desde donde el PRI contraatacó en 2012 para regresar a la presidencia con Peña Nieto, quien gobernó ese enclave entre 2005 y 2011.
"Pierda o gane, el partido Morena de López Obrador pude celebrar, porque no se esperaba que fuera tan competitivo", explicó Crespo.
Nueva crisis de la partidocrtacia
El foco de las elecciones en México es la postura de cada fuerza política "ante la corrupción y el papel de las fuerzas armadas en las tareas de seguridad pública", dijo a Sputnik la directora del Instituto de DDHH y Democracia, Rocío Culebro.
Las elecciones y la alternancia se han vuelto parte de la normalidad democrática, según la experta en derechos políticos.
"Pero el combate a la impunidad es una tarea que sigue pendiente para todos los partidos", atajó Culebro.
Crespo define al sistema político mexicano como "una partidocracia, porque no es una verdadera democracia representativa".
"Entre todos protegen sus intereses, todos incurren en corrupciones, con poco castigo, y en muchos casos con impunidad", argumentó.
Y 16 años de alternancia política no han puesto fin a las ilegalidades.
La compra de votos y los topes de gastos de campaña ilegales son algunas de las irregularidades denunciadas todos los días en los últimos 16 años.
"Todos los partidos, incluyendo a Morena, son más o menos iguales, el problema es la partidocracia que no cede terreno a los ciudadanos", remató Crespo.
El investigador estimó que su trabajo de observación electoral contra la compra ilegal de votos y su empeño en revisar leyes electorales son un paso necesario para la democracia mexicana.
El columnista Raymundo Riva Palacio escribió el viernes en el medio El Financiero que "el miedo entró en Los Pinos (residencia presidencial)" ante los comicios en el feudo de PRI.
Peña Nieto "se ha topado con la realidad de una posible derrota de su candidato (en el estado de México) y, de acuerdo con personas con acceso cotidiano al inquilino de Los Pinos, está intratable", dijo Riva Palacio.
La situación es de "alto riesgo" para el PRI si pierde su último bastión electoral en el país, observó el columnista.