"La única herramienta legal que, dadas las circunstancias, les queda a los trabajadores para lograr que las empresas asuman el principio de acuerdo dialogado es ejercer el derecho a la huelga que ya estaba convocada, los días 5, 7 y 9 de junio", aseguró la CETM a través de un comunicado.
La negociación entre los trabajadores y patronal portuaria se deriva del proceso de liberalización del sector emprendido por el Gobierno —y convalidado por el Congreso— en respuesta a una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que en diciembre de 2014 se pronunció contra las sociedades de gestión de estibadores, encargadas de manejar la contratación en los puertos.
"La patronal ha dado un giro con respecto al planteamiento hecho la pasada semana y ya no se compromete con la subrogación de los trabajadores", explicó Antolín Goya, portavoz de la CETM.
Según explicó Goya, los trabajadores exigen que la patronal "cumpla con la palabra dada" y "garanticen todos los puestos de trabajo", que se contabilizan por algo más de 6.000.
Lea más: El Parlamento español convalida la polémica reforma de la estiba
Ante este nuevo escenario de desacuerdo, la CETM avanzó que, además de tener intención de ir a la huelga en todos los puertos del país los días 5, 7 y 9 de julio, se anunciará un nuevo calendario de paros para las semanas venideras.